Nos nutrimos no solo de lo que comemos (y absorbemos!), también de lo que vemos, lo que tocamos, de las personas con que vivimos o trabajamos… Los 5 sentidos son como puertas por las que el mundo se cuela en nuestro interior. Es para tener en cuenta, ¿no?
Entonces, tenemos que comenzar a diferenciar la palabra comida de nutriente. No todo lo que como me nutre, y no me nutro solo de lo que como. Por eso el ayurveda le da muchísima importancia, no solo a lo que comemos, sino a cómo lo hacemos. Si como estando triste o enojada, esas emociones serán parte del alimento. Si quien prepara el alimento lo hace con amor, ese será sin dudas el ingrediente más nutritivo del palto.
Nuestro cuerpo físico está formado por lo que comemos y absorbemos. Pero no solo nuestro cuerpo físico, también nuestra mente… Los alimentos que consumimos forman las células y tejidos de nuestro cuerpo, pero también dejan su impronta en niveles más sutiles del ser, como la mente. El ayurveda contempla un aspecto energético además del físico, tanto a nivel de los alimentos como a nivel fisiológico. Debemos “digerir” no solo lo que ingerimos, también lo que vivimos y las diferentes situaciones vitales por las que vamos atravesando a lo largo de la vida.
Respecto a los alimentos, no hay reglas generales desde esta mirada. Lo que es bueno para un individuo puede no serlo para otro. ¿De qué depende esto? De múltiples factores como la constitución natural de la persona, su desequilibrio actual, la estación del año, la etapa de la vida en que se encuentra. “Nada es bueno para todos y todo es bueno para alguien”.
Pero es para tener en cuenta, que no somos solo lo que comemos y absorbemos. Somos también lo que pensamos y sentimos. Somos los libros que leemos, los lugares a los que viajamos, la casa que habitamos y las personas con las que nos relacionamos. Reducir lo que somos a lo que comemos es una visión extremadamente simplista de nuestro ser. Siempre digo que somos seres multidimensionales, y así como el físico es solo uno de nuestros cuerpos; el alimento y su correcta digestión y absorción es solo una parte de lo que nos constituye.
Cuidar nuestra alimentación es clave para gozar de buena salud, como también lo es construir vínculos sanos, vivir a tono con la naturaleza, escuchar nuestro cuerpo y gestionar nuestras emociones, para conocernos mejor y desarrollar todo nuestro potencial.
Así como el ayuno puede ser una vía de desintoxicación; también puede serlo dejar de ver a ciertas personas, evitar determinados lugares o darle fin a relaciones tóxicas.
¿Ya lo habías pensado? ¿Qué cosas nutren vida? ¿Qué cosas te intoxican o desvitalizan?