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Somos lo que comemos y digerimos

Seguramente ya has escuchado decir que somos lo que comemos, y así es. Comer es una de las formas más íntimas de contactarnos con lo que está “afuera”. Nuestro sistema digestivo es una puerta de entrada gigante y eso que nos ponemos en la boca y tragamos, literalmente pasa a ser parte de nuestro cuerpo. De ahí la importancia de ser selectivos con lo que comemos, de alimentarnos con “conciencia”, sabiendo qué es exactamente lo que estamos ingiriendo, y eligiéndolo. Alimentarnos bien es simplemente fundamental. Pero no es suficiente! Si mi digestión no funciona adecuadamente, está faltando una parte esencial del proceso.

Puedo comer todo natural, agroecológico, sáttvico, adecuado al dosha y la estación, pero si no puedo digerirlo no podré absorberlo y utilizarlo.  Así como entró, el alimento saldrá sin poder ser aprovechado.

La salud digestiva es también importante porque  nuestro intestino no solo se encarga de la digestión, también es responsable de protegernos de sustancias que pueden ser nocivas, como  gérmenes, toxinas, venenos y  alérgenos, a través de lo que se llama la barrera intestinal. Se le llama barrera porque a este nivel, las células de la mucosa están muy juntitas una al lado de la otra, impidiendo que entren sustancias que normalmente no deberían entrar.

Y como si todo esto fuera poco, es a nivel digestivo donde reside gran parte de nuestra microbiota, ese universo de bacterias, hongos, virus y parásitos que conviven con nosotros, y cumplen un rol crucial no solo en la digestión de alimentos, sino también en la síntesis de vitaminas, hormonas y neurotransmisores, por mencionar algunas funciones.

Cada vez hay más evidencia científica sobre la importancia de una digestión saludable. Lo maravilloso de todo esto es que el ayurveda hace 5000 años que viene sosteniendo  lo mismo. “Todas las enfermedades comienzan en el aparato digestivo” es un lema ayurvédico que me voló la cabeza cuando lo escuché por primera vez. Porque lo explica clarito y no es “algunas” enfermedades, sino todas! De ahí la importancia de cuidar de nuestra digestión para gozar de buena salud.

Algo maravilloso del ayurveda, es que no generaliza. Cada persona es un UNIVERSO que será necesario descubrir e interpretar, para un adecuado diagnóstico y tratamiento. Sin embargo, hay algunas recomendaciones generales en relación a digestión que a todos nos pueden servir.

Acá te las comparto, para que puedas tenerlas a mano. Espero te sean de utilidad!

Recomendaciones para una digestión saludable:

  • Agradecer internamente el alimento
  • Ambiente adecuado: Comer sentado, en un lugar agradable, tranquilo, solo o con buena compañía, sin frío y sin ruidos extremos.
  • “Cuando como, como”. Evitar el multi tasking. Concentrarse en el acto de comer. No hablar demasiado, no leer, ni ver tele, ni manejar cuando comemos.
  • Actitud mental adecuada: No comer cuando estamos tristes, enojados o muy preocupados, ni durante una discusión.
  • Masticar bien el alimento: la digestión comienza en la boca, masticando. Y es la única etapa voluntaria de la digestión.
  • Comer despacio: no solo nos garantiza masticar bien, sino también nos da tiempo de percibir la sensación de saciedad.
  • No tomar líquidos fríos antes o durante las comidas, ya que disminuye el fuego digestivo. Si tomamos líquido, que sea agua a temperatura ambiente o té de hierbas.
  • No comer de más: la cantidad adecuada es la que cada uno puede digerir. Y esto depende directamente de nuestro agni o fuego digestivo/hambre (1° Ley alimentación).
  • No comer hasta no haber digerido la comida anterior. Y esto requiere del registro de nuestro hambre! La recomendación es no comer si no se tiene hambre, ni dejar de comer cuando se tiene realmente hambre (1° Ley alimentación).
  • Ingerir alimentos reales no procesados y agroecológicos (2° ley alimentación).
  • Ingerir alimentos adecuados al dosha y la estación (3° ley alimentación).
  • No comer alimentos incompatibles (3° ley alimentación)
  • Permanecer sentado 5´-10´después de comer y luego hacer una caminata suave.
  • Evitar el ejercicio o mantener relaciones sexuales inmediatamente  después de comer.
  • El almuerzo debe ser la comida principal : el fuego digestivo es mayor al medio día.
  • Cenar temprano y liviano. Preferiblemente antes de que oscurezca. No ingerir alimentos por al menos 2 hs. antes de acostarse
  • No ingerir alimentos pesados por la noche: queso, yogurt, carnes, pan, levaduras, verduras crudas, pastas, papa, banana, postres elaborados. Ya que el fuego digestivo baja cuando se pone el sol.

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